Pequeña sonatina para clarinete y banda, escrita para poder ser utilizada por los estudiantes de primeros cursos de grado profesional de clarinete.

Es una obra en un solo movimiento, aunque está estructurada en tres pequeñas secciones que están unidas sin corte alguno.

La obra está dedicada a Marta, la hija del compositor, y en los movimientos o secciones se ha querido plasmar un poco de ella.

Pequeña pieza en su extensión, pero grande en lo que representa.

Dedicada también a todos los clarinetistas noveles, para que disfruten de este hermoso instrumento.